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Por Andrea Cárdenas
@andre.yogini

​La conciliación de la vida laboral con la vida personal muchas veces no es fácil, cuesta encontrar ese punto donde nos sentimos a gusto con las distintas facetas de nuestras vidas. En el mundo agitado en el que vivimos hoy, se hace cada vez más común que las horas que pasamos en nuestros trabajos consuman gran parte del día, transformándose en una rutina intensa y altamente demandante. Pero, ¿qué sucede cuando por decisión personal decidimos tener no sólo uno, sino dos trabajos? ¿Cómo hacerlo cuando éstos son parte de mundos completamente distintos?

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A lo largo del tiempo, la tendencia de hacer del Yoga un trabajo estable, ha aumentado notoriamente. Cada vez hay más personas que han optado por certificarse como instructor de Yoga y hacer de la práctica su trabajo a tiempo completo, entregándose a la oportunidad de poder transmitir y compartir esta milenaria disciplina con sus alumnos. Asimismo, hay quienes han decidido hacer del Yoga su segundo trabajo, en la búsqueda de poder complementar aquel que ejercen a jornada completa y poder encontrar un espacio de entrega y conexión alejado de la vida de oficina. Si bien esta elección permite a aquellas personas que han elegido hacer del Yoga un estilo de vida, complementar motivaciones distintas, muchas veces se hace difícil poder conciliar y equilibrar todos los factores que se ven involucrados en esta decisión.

A pesar de lo anterior, existen aspectos claves que al tenerlos presentes en el día a día, permiten encontrar ese punto de equilibrio y calma en quienes han optado por este camino:

1. Escoge bien y organiza el tiempo: elige adecuadamente el lugar y horarios en los que vas a impartir las clases de Yoga, de manera de ser eficiente con los tiempos y no andar siempre corriendo.

2. Aprende a priorizar: intenta gestionar adecuadamente tu carga laboral durante el día, dejando un tiempo para bajar las revoluciones y prepararte bien antes de dar clases.

3. Cuida la alimentación: tener dos trabajos puede significar menos tiempo para poder comer. Lleva siempre contigo snacks saludables que saquen de apuros y organiza tus comidas prefiriendo alimentos “vivos”, que te ayuden a tener más energía y sentirte liviano.

4. Ten presente las responsabilidades: nunca olvides las responsabilidades y compromisos que asumiste en cada trabajo. Por muy distintos que sean, busca cumplirlos y dar lo mejor de ti en cada contexto.

5. Aprende continuamente: mantente actualizado y sé proactivo; recuerda que la vida es un proceso de aprendizaje continuo. Crea espacios para seguir aprendiendo y perfeccionándote, encontrando esa motivación que te llevará a ser cada día mejor.

6. Deja tiempo para ti: crea espacios que te permitan renovar energías y desconectarte de la rutina que es demandante física, mental y emocionalmente. Destina tiempo para tu práctica personal, leer, meditar, compartir con familia y amigos, lo que te ayudará a sentirte pleno y en paz contigo mismo.

Por último y más importante: RESPIRA… la respiración consciente te ayudará a encontrar la calma, a conectarte contigo mismo en cada momento, a aquietar los pensamientos y ver las cosas de forma clara. Te permitirá volver a recordar la importancia del por qué elegiste trabajar entre el mat y la oficina.   

ARTÍCULOS REVISADOS

Yoga Teaching Increasingly Popular as Second Career (2011). Alexis Grant. U.S. News.

Why Breathing Deeply Helps You Calm Down (2017). Christopher Wanjek. LiveScience.

Entre el mat y la oficina,

 ¿cómo encontrar el equilibrio?

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